El duelo es un proceso psíquico que atravesamos como consecuencia de una pérdida real (fallecimiento) o simbólica (mudanzas, rupturas, pérdida de empleo, etc). Es desencadenado por un evento que representa un proceso de quiebre y lleva a la persona a cuestionar sus creencias, emociones y su realidad actual, generando cambios en su identidad: no somos los mismos después de un duelo.

En el equipo, nos capacitamos específicamente en la temática de duelos y trabajamos desde un enfoque integrativo centrado en las Tareas del Duelo. Este enfoque ayuda a identificar necesidades para cada tipo de duelo y trabajar con herramientas que permitan elaborar cada una de las tareas del duelo.

Buscamos que puedas integrar ese suceso como parte de tu historia y resignificar la pérdida, además de brindar escucha, contención y validar las emociones que se presenten durante el proceso.

Existen distintos tipos de duelo y cada uno presentara su complejidad para quien se ve afectado. Estos son:

• Duelo por ruptura: Ya sea de una pareja o una amistad, todo vínculo que se rompe representa para ambas personas un proceso de duelo.
• Duelo por fallecimiento: El ejemplo más claro de duelo y el que reconocemos con mayor facilidad es el de la pérdida física de alguien querido.
• Duelo perinatal: Es el duelo que se da ante la pérdida de un embarazo o de un bebé durante los primeros meses de vida.
• Duelo migratorio: La migración en cualquier escala, ya sea de ciudad, de región o de país, puede representar para el migrante un proceso de duelo de su lugar natal.
• Duelo por la Salud: Este duelo está presente en personas que transitan cualquier proceso de enfermedad crónica o degenerativa.
• Duelo por pérdida de mascotas: Este es uno de los duelos más inhabilitados por la sociedad, pero para las personas representa un proceso igual de doloroso que con otros tipos.

Podemos clasificar al duelo en dos tipos: los duelos adaptativos (cuando se acepta la pérdida y avanza en el proceso de duelo) y los patológicos (cuando no se avanza en el proceso y aparece sintomatología emocional y física que se mantiene en el tiempo). En ambos casos, es importante contar con el acompañamiento de un psicólogo especialista en la temática que pueda acompañar el proceso y brindar las herramientas necesarias.

Es importante que consultes con un profesional de la salud mental cuando transitaste un duelo (reciente o no) y presentes los siguientes síntomas:

Emocionales:

Ansiedad, angustia repentina, insomnio, dificultades de alimentación (falta y/o exceso de apetito), irritabilidad, miedo/hipervigilancia, pensamientos intrusivos, aislamiento, desgano, falta de disfrute, adicciones, etc.

Físicos:

Contracturas, problemas digestivos, migraña, accidentes.

Cognitivos:

Desorganización, desconcentración, fallas en la memoria, sensación de shock, etc.

Estos síntomas van afectando diferentes áreas de tu vida cotidiana: personal, laboral, vincular. Sin el tratamiento indicado puede transformarse en un trastorno crónico.

Los seres humanos no estamos preparados para perder algo/alguien que fue significativo para nosotros, pero si podemos buscar las herramientas para afrontar el proceso de pérdida y transformar la ausencia en presencia (simbólica), y que el dolor no ocupe todo el espacio.

Si presentas alguno de estos síntomas te recomendamos consultar con un psicólogo online especializado en la temática.

Nuestros profesionales te acompañaran en tu proceso de duelo para que lo afrontes de la mejor manera posible.